Portada Antonio Morales


Gran Canaria en la buena senda (II)

Podríamos ampliar este análisis hasta detallar las miles de actuaciones y decisiones que está suponiendo la acción de gobierno, pero resulta imposible condensarlas en este espacio. Confío en que este análisis nos haya servido de muestra para estimular el orgullo compartido por el progreso de nuestra isla.

La semana pasada dedicaba mi reflexión a presentar una valoración general del trabajo realizado por el grupo de Gobierno del Cabildo de Gran Canaria durante este mandato, y presentaba los datos más significativos del proceso de transformación que nuestra isla está experimentando. Con cifras de organismos independientes comprobamos que la economía se ha reactivado y que los indicadores sociales mejoran, aunque quede mucha tarea por realizar.

Quiero completar mi análisis aportando hoy una selección de actuaciones en áreas concretas que evidencian una acción de cambio que está mejorando la vida de nuestra gente. Y las impulsamos a través de tres direcciones fundamentales: la dinamización de la actividad económica, la potenciación de los servicios públicos que se ofrecen por el Gobierno insular para aumentar la cohesión social y el desarrollo de la ecoisla en todas las dimensiones que la definen. 

Gran Canaria se transforma porque hay más de mil quinientas obras terminadas o en ejecución, huyendo de actuaciones inútiles y priorizando la mejora de las condiciones de vida de la mayoría, y poniendo en marcha acciones estratégicas que generan valor añadido y producen una diversificación de nuestro modelo económico. El Plan Gran Canaria Transforma con todas sus líneas de actuación, concreta y distribuye 941 millones de euros de inversión en cuatro años. Salvo los 262 millones del FDCAN, el grueso de estas inversiones procede de fondos propios del Cabildo. 

Las políticas de igualdad de género son prioritarias para este gobierno y tienen una consideración transversal. Por primera vez esta área se gestiona por una consejería específica con más de 20 millones para la lucha contra la violencia de género, la puesta en marcha de un plan estratégico: Gran Canaria por la igualdad, el Consejo Insular de Igualdad, el estudio diagnóstico de la desigualdad en Gran Canaria y un plan extenso de actuaciones en colaboración con los ayuntamientos. 

Tenemos como prioridad reducir los niveles de desigualdad y exclusión social porque son insoportables para las personas que los sufren y para quienes respetamos los derechos humanos. Para reducirlos hemos intensificado las Políticas Sociales a través de medidas muy concretas: el plan de lucha contra la pobreza concedió a través de los ayuntamientos y entidades sin fines de lucro más de 10.900 ayudas de emergencia social y se dedicaron 5.300.000 euros extras a este fin y a la distribución de alimentos. A esta cantidad tenemos que añadir 7.000.000 de euros en los presupuestos ordinarios, por lo que la cantidad total en ayudas directas a ONGS y ayuntamientos para reducir y paliar la pobreza ascendió a 12.000.000 de euros.

Después de muchos años de parálisis hemos puesto en marcha un Plan de Infraestructuras Sociosanitarias que con una financiación de 95 millones va a posibilitar la creación de 1453 plazas distribuidas por toda la geografía insular. Ya se han iniciado algunas obras y disponemos de solares o edificios para la construcción o adaptación, en colaboración con los ayuntamientos, del resto hasta completar esta decisiva planificación.  

La cohesión social a la que aspiramos en nuestra isla tiene en el empleo una tarea preferente. La mejora en los niveles de renta, vivienda, educación, sanidad o atención a la dependencia está condicionada por la generalización del empleo y la reducción del paro que nos degrada. Por eso hemos implementado un plan integral de actuaciones y destinado más de 56 millones a programas de empleos directos, incentivos empresariales, inserción laboral, formación, que ha llegado a más de 10.000 personas. Ha favorecido a todos los sectores mayoritarios en la demanda de empleo: mujer, jóvenes, mayores de 45 años, personas de difícil inserción, y personas  con discapacidad. La isla de Gran Canaria fue la que lideró en el conjunto del archipiélago el descenso del paro en el año 2018. En concreto, el desempleo bajó en la isla redonda un 4,93%, lo que en términos absolutos supone una caída del número de parados en 4.565 personas, según los datos del Observatorio de Empleo (OBECAN) del Gobierno de Canarias. La elevada cifra supone que uno de cada dos parados que dejaron de formar parte de las listas del desempleo en Canarias, es de Gran Canaria.

El Cabildo de Gran Canaria ha potenciado el Consorcio de Viviendas con una inversión superior a los 11 millones de euros en políticas públicas de vivienda: 3.325 viviendas rehabilitadas, ayudas directas a 427 familias en situación de vulnerabilidad, apoyo a la lucha contra los desahucios y ha elaborado el I Plan de Vivienda de Gran Canaria.

Una línea central que caracteriza nuestra acción de gobierno es la implantación de un modelo de desarrollo integral que reconocemos con el nombre de Ecoisla. La prioridad es la consecución de la soberanía energética y por ello la central hidroeléctrica de Gran Canaria Chira-Soria será un pilar fundamental para la modificación de nuestras condiciones energéticas. Hemos convenido con la empresa concesionaria la transformación del proyecto convencional inicial con el objetivo de que se convierta en la gran pila de almacenamiento que permita la penetración de un 70% de las energías renovables que necesita la isla. La inversión pública prevista se acerca a los 400 millones de euros. Ya se han invertido más de 20 millones de euros en la redacción del proyecto y se ha licitado la dirección de la obra. En estos momentos el proyecto está en información pública. A este elemento estratégico se une la creación del Consejo Insular de la Energía que ha puesto en marcha proyectos de parques eólicos y fotovoltaicos, creado una red de recarga de vehículos eléctricos, generado ayudas para el autoconsumo… Se ha investigado la implantación de la geotermia en nuestra isla y puesto en marcha desde el CIA el Plan Renovagua para llevar las energías limpias a toda la desalación y la depuración con un presupuesto total de 18 millones de euros… También hemos elaborado una Estrategia de Lucha contra el Cambio Climático donde el Pacto de los Alcaldes por el Clima juega un papel fundamental.
Junto a la soberanía energética avanzamos hacia la soberanía alimentaria. Los avances en estos tres últimos años han sido considerables: la producción de leche se ha incrementado en un 32% y en un 30% las cabezas de ganado vacuno. Se han incorporado igualmente al mundo rural 98 agricultores y 10 ganaderos (el 46,6% y el 25,6% del total regional). Gracias a las ayudas para recuperar las tierras en desuso se han sumado a la actividad agrícola 250 nuevas hectáreas de suelo. Con recursos del Cabildo se han legalizado 40 explotaciones ganaderas nuevas. Se ha pasado de 300 hectáreas de producción ecológica a 700, con un total de 310 productores. Se han realizado caminos, redes de distribución y depósitos por los rincones de la isla con más dificultades para el riego, con una inversión de  11,6 millones.

Este despliegue de acciones transformadoras incluye el incremento de la masa forestal para duplicar en diez años las hectáreas arboladas que representan el 15% de nuestra superficie. Hemos aprobado para ello el equivalente al céntimo verde forestal que aporta 4,5 millones de euros a esta iniciativa. 

Otro reto relevante de la ecoisla es la movilidad sostenible. La emisión de los bonos para estudiantes, residentes o personas pensionistas o dependientes están teniendo una acogida muy favorable por nuestra gente y suponen una inversión con fondos propios del Cabildo de más de siete millones de euros. Estas medidas están aumentando significativamente el uso del transporte público. Se han redactado definitivamente todos los proyectos para implantar el transporte guiado en Gran Canaria. 

Estamos realizando una inversión histórica en polígonos industriales y empresariales con 31 actuaciones en 15 áreas industriales activas, por un valor de 10.234.639 euros. Importante es la inversión, pero hay que valorar especialmente el nivel de acuerdo y participación de los representantes empresariales y de los gestores de esos parques.

En el objetivo de la diversificación económica hemos avanzado en un apoyo decidido al sector comercial. Realizamos una inversión global de 12 millones de euros con más de 30 actuaciones que están renovando y modernizando nuestra oferta comercial. Las zonas comerciales abiertas han recibido la mayor parte de esa inversión. Los 6.400 empleos que se han creado en el sector tienen que ver con esta acción consensuada, constante y transformadora.

Los excelentes datos turísticos son fruto de múltiples colaboraciones y esfuerzos profesionales, empresariales e institucionales que nos han permitido resultados históricos. El Cabildo de Gran Canaria ha incrementado el presupuesto de promoción de la isla en un 22%. Otro de los frutos positivos es que ha aumentado notablemente la conectividad con diez nuevos destinos. Nos conectamos con 25 países y 9 compañías nuevas han empezado a operar con la isla. El conjunto de inversiones que estamos realizando en las zonas turísticas sobrepasa los 20.000.000 de euros. Hay algunas actuaciones que son emblemáticas: una es la restauración ambiental de las Dunas de Maspalomas que está en marcha, otra es la recuperación del parque Tony Gallardo con su enorme valor ambiental y turístico y, desde luego, la reapertura del Faro de Maspalomas después de más de doce años sin actividad. Estamos revalorizando un sector que es decisivo para nuestro desarrollo equilibrado.

Apostamos por la economía azul impulsando la biotecnología marina y la acuicultura desde la iniciativa Bioasis Gran Canaria para lo que hemos conseguido 15 millones de euros de inversión. El impulso al sector audiovisual ha conseguido que importantes empresas multinacionales se instalen en la isla y que se hayan realizado numerosos rodajes. Lo estamos afianzando con la construcción – ya hemos iniciado el procedimiento- de unos  platós de cine.

Estamos comprometidos con el avance de la sociedad del conocimiento. Para asegurarlo estamos avanzando en el proyecto Gran Canaria Isla Inteligente, una propuesta de más de 30 millones de euros para soluciones tecnológicas avanzadas en la prevención de incendios forestales, transporte público, recursos hidráulicos, carreteras, servicios turísticos…

La cultura y el deporte son elementos modernos e imprescindibles para soldar sentimientos y emociones. Gran Canaria hoy es una referencia cultural mundial. Acabamos de celebrar la mayor Feria Internacional de música de raíz del mundo: el Womex y todavía resuenan los ecos del recobrado WOMAD. Hemos recuperado el Concurso Internacional de Canto Alfredo Kraus y puesto en marcha el proceso para la apertura definitiva de su futura casa museo. El Circo del Sol instalará su carpa principal a partir de julio en el sur de nuestra isla con nuestra colaboración..  Y al mismo tiempo una programación muy exigente llena el Teatro Cuyás, el teatro de Gran Canaria, que es referente para todo el estado, igual que la Fundación Teatro Auditorio que gestiona el Auditorio Alfredo Kraus y el Teatro Pérez Galdós con la que nos hemos comprometido equiparando nuestra aportación a la del ayuntamiento de LPGC. Hemos iniciado las obras del Museo de Bellas Artes (5,5 millones de inversión), recuperado el espíritu fundacional del CAAM, impulsado nuestra OFGC… El turismo cultural cada vez se hace más presente.

Y por último, hay un icono que dirige nuestra mirada y es la declaración de Risco Caído y los Espacios Sagrados de Montaña como Patrimonio de la Humanidad. 
He comentado algunas manifestaciones del proceso apasionante de modernización que estamos viviendo en la isla y donde el Cabildo de Gran Canaria está fuertemente implicado. Tendría que hablar con detalle de la Isla Europea del Deporte, de la Participación Ciudadana, de la Solidaridad Internacional, del embellecimiento del paisaje, de las carreteras, de la transparencia… Podríamos ampliar este análisis hasta detallar las miles de actuaciones y decisiones que está suponiendo la acción de gobierno, pero resulta imposible condensarlas en este espacio. Confío en que este análisis nos haya servido de muestra para estimular el orgullo compartido por el progreso de nuestra isla.

Gran Canaria en la buena senda (I)

El gran mensaje que nos queda al volver la vista al trabajo de estos años es que Gran Canaria posee unas potencialidades enormes que nos llaman a mantener la apuesta por un proyecto de progreso sostenible, social y que promueve la dimensión medioambiental

Hace unas semanas se celebró en el Cabildo de Gran Canaria el tercer debate sobre el estado de la isla y pudimos ver cómo quedan confirmadas las buenas sensaciones y los datos que hablan de una isla que se recupera de las consecuencias de la crisis. La política sirve para atender las necesidades de las personas y cuatro años después de asumir el Gobierno de Gran Canaria muchos de los compromisos que asumimos con la ciudadanía están cumplidos o en proceso de ejecución. Somos conscientes de que nuestra experiencia está siendo seguida por miles de personas que ven en nuestro Cabildo la esperanza de gobernar para la mayoría y al mismo tiempo defender los derechos de una isla que reclama equilibrio y consideración. Creo que podemos compartir la alegría de que aquellas expectativas se están cumpliendo. Gran Canaria vuelve a liderar el progreso de Canarias. 

Estamos respondiendo a los retos concretos en cada una de las áreas, pensando en los 21 municipios y en todos los sectores. Pero somos conscientes de que estamos librando otra batalla menos visible, la que prueba que es posible una política basada en valores, en la decencia y en alternativas que no estén supeditadas al mercado y a los intereses económicos de las minorías. Los indicadores hablan del acierto en las grandes políticas que tienen que ver con el empleo, la cohesión social, la sostenibilidad, la diversificación económica o la igualdad. Pero tan importante como esos datos objetivos es el convencimiento de que disponemos de un Cabildo que lidera la defensa de una isla frente al abandono o a la desconsideración del Gobierno de Coalición Canaria.

Nos enfrentamos al discurso de los profetas del pesimismo que quieren hacer ver negro donde hay verde, que dicen gris donde hay una realidad multicolor porque renace la actividad empresarial, los proyectos sociales, la inversión pública, la colaboración con la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y las organizaciones no gubernamentales. Empezamos a recuperarnos de la triste herencia que nos dejaron las políticas de austeridad y recortes sociales. No está todo conseguido, pero vamos en buen camino y con un horizonte lleno de esperanza y de oportunidades. Los ataques injustificados y sectarios de algunos medios de comunicación nos confirman que estamos gobernando para la mayoría y pensando en el interés general.

Al volver la vista al trayecto recorrido desde junio de 2015 hasta hoy, descubrimos una Gran Canaria que se está recuperando de la crisis, que muestra unos indicadores socioeconómicos de mejora continuada, que está aumentando la confianza en un proyecto común de progreso, que está reduciendo las graves desigualdades, que moderniza sus infraestructuras y que avanza hacia la ecoisla que nos hace distintos y sostenibles. Por eso puedo afirmar que Gran Canaria Se Transforma. Queda mucho por hacer, pero los cimientos que hemos ido construyendo sostienen ya con firmeza un modelo, un proyecto, una estrategia, un objetivo.

En este cambio de situación la acción del Cabildo de Gran Canaria está siendo significativa, por sus inversiones y decisiones directas y también por las sinergias, por la confianza, por las complicidades que está generando. 

La Encuesta de Población Activa, publicada por el ISTAC, con cifras del cuarto trimestre de 2018, nos muestra que en estos últimos tres años ha crecido la población activa en 10.500 personas. De cada 10 personas que se han incorporado al mercado de trabajo en Canarias, 7 lo han hecho en Gran Canaria. Este crecimiento nos confirma que las expectativas de empleo en nuestra isla han aumentado y por eso han crecido las inscripciones.

La evolución de la población ocupada todavía es más relevante. En estos tres años se han ocupado 49.360 personas nuevas, lo que supone un crecimiento del 18 % respecto al 2015 cuando asumimos el gobierno de la isla. Es el mayor incremento en un periodo tan corto de tiempo, desde la época de la gran expansión económica de los años noventa. De cada 10 empleos creados en Canarias 4, casi 5, se han creado en Gran Canaria.

Otro dato muy positivo es la disminución del número de personas paradas. En este tiempo hay 40.000 personas paradas menos, 39.210 para ser más exactos. Un 30 % menos de las que había en 2015. La tasa de paro se ha reducido del 30 % al 21 %. 9 puntos menos. No quiero caer en el tópico, pero es verdad que es la mejor política social, aunque en nuestra tierra no sea suficiente para evitar la pobreza y la exclusión. 

No podemos darnos por satisfechos, pero esta evolución nos muestra el camino por donde debemos seguir avanzando: apoyo a sectores económicos de alto valor tecnológico como el de la economía azul, el de la economía circular, el de las energías renovables, el de la producción y depuración de agua, el de la innovación y la investigación, el de las infraestructuras de la comunicación y las telecomunicaciones, al sector turístico o incrementando notablemente la inversión pública… 

Los datos son contundentes. Gran Canaria progresa por el esfuerzo de toda la sociedad. El número de personas afiliadas a la Seguridad Social ha crecido en 51.933 personas, un 17,5 % de aumento.  Y quiero agradecer el esfuerzo de la pequeña y mediana empresa que está protagonizando el 86 % de estas contrataciones. Estamos correspondiendo a esta determinación con una política de apoyo a las PYMES, a la Cámara de Comercio, a las zonas comerciales abiertas, a los polígonos industriales y a las empresas del sector primario.

En correspondencia con los datos anteriores de afiliación a la Seguridad Social, el Ministerio de Trabajo publica que en Gran Canaria se han inscrito 1.945 empresas nuevas en la Seguridad Social. En el cuarto trimestre de 2018 hay 24.398 empresas inscritas, lo que supone un crecimiento de casi un 8 %. Mientras en Canarias baja un 1,4 el Índice de Confianza Empresarial, en Gran Canaria aumenta en casi un punto.

Un factor fundamental para poder presentar hoy un balance positivo es que hemos contado con un gobierno insular estable, centrado en la tarea y con un programa de gobierno claro que orienta las grandes actuaciones hacia las necesidades estructurales de todos: la cohesión social y la generación de empleo, el crecimiento económico, el desarrollo de la ecoisla, la recuperación del sector primario e industrial ligado a nuevos nichos de desarrollo que se apoyan en la innovación, la economía azul y la economía circular, el apoyo y la diversificación del sector turístico, el impulso cultural y deportivo,  la recuperación y dignificación del patrimonio histórico que nos identifica. Hoy nuestro Cabildo se percibe como una institución prestigiada que no está sometida a inestabilidades y contradicciones que pudieran distraernos de lo que es la obligación principal de un gobierno, la consecución de los compromisos con la ciudadanía. 

Un segundo factor que explica el progreso de estos años es que estamos generando un incremento histórico de la inversión pública y del presupuesto destinado a la reactivación económica y al empleo: Plan de Cooperación, Plan Financieramente Sostenible, Plan Transforma Gran Canaria. En este tiempo hemos pasado de un presupuesto de 592 millones de euros en 2015 a los 913 millones actuales. Un 54,16% más. Y en ese incremento un dato muy destacable es que se han dedicado a la inversión 941 millones en los cuatro años, frente a los 518 del mandato anterior. 1500 obras en estos momentos repartidas por todo el territorio insular. Cuando se dice que no hay políticas alternativas, aquí tenemos un botón de muestra de que es posible optar desde las administraciones públicas por políticas de reactivación y estímulo al empleo y no por la reducción que defiende el Partido Popular o las propuestas neoliberales.

Y la tercera decisión que está en la causa del avance de estos años ha sido la alianza con los ayuntamientos y la sociedad civil de Gran Canaria que nos ha permitido acordar prioridades, descentralizar la gestión y generar complicidades para que la transformación llegue a todos los rincones y a todos los sectores de la isla. El incremento de aportaciones para que la iniciativa municipal se proyecte sobre necesidades, y que estas se resuelvan por sus instituciones más cercanas, los ayuntamientos, ha sido espectacular durante este mandato y muchos alcaldes y alcaldesas de todos los colores lo consideran histórico. Y no solo debemos fijarnos en las cantidades sino en que son actuaciones que han decidido los ayuntamientos, evitando el centralismo o el dirigismo del Cabildo y en muchas ocasiones con la cesión de la contratación o la gestión de las obras. 

El gran mensaje que nos queda al volver la vista al trabajo de estos años es que Gran Canaria posee unas potencialidades enormes que nos llaman a mantener la apuesta por un proyecto de progreso sostenible, social y que promueve la dimensión medioambiental. Estoy seguro que seguirá dando frutos en la medida que repitamos las complicidades que estamos viviendo durante estos años y huyamos del pesimismo interesado o el silencio amordazado.